TU LAS TRAES Porque aca nadie se hace cargo de nada.

Y si, era de esperarse que se muera. Pobre Juana ya no podía más y los últimos días ni caminaba. El día anterior estuvimos las dos tiradas en el pasto mientras yo estudiaba. Estaba tan flaca y con la nariz tan seca que lo único que pude pensar fue en Cindy y me invadió una sensación bastante fría.
El Jueves salí del trabajo y estaba tan acelerada por el parcial que tenía que dar que cuando me dieron la noticia, estuve como 30 segundos sin entender que era lo que me estaban diciendo. Después no pude parar de llorar.
Todos dicen, la vida continua y es solo un perro. Pero es mi perro y la ausencia que se siente es enorme. Quise y quiero ese perro más que cualquier cosa que no hable mi mismo lenguaje. Desde el Jueves que me duermo pensando en Juana y en alguna cosa que hizo que me haya hecho reir.
Hoy traen un nuevo perro, se supone que para no sentir esa ausencia tan grande que dejó ella. ¿Coómo llenar ese espacio vacío? ¿Cómo no sentir que están tratando de reemplazar algo que es irremplazable? Este nuevo perro no va a ser ni cuarto de lo que ella fue, literal y metafóricamente (mide como -10 cm.).
Ayer a la noche no pude parar de llorar. Por momentos siento que no deberíamos tener un perro nuevo, que es como faltarle el respeto a Juana, que durante tanto tiempo fue parte de la familia. Me pregunto si debería encariñarme con Fidel (el nuevo), si debería ponerme contenta. Hay veces que no puedo evitar sonreir en pensar en un cachorro y al instante se me viene a la mente Juana con cara de "...que están haciendo?? Me cambian por un derivado de rata" y así, me vuelvo a amargar.
Veremos que va pasando en los próximos días y ver cuan agradable es el nuevo. No le va a llegar ni a los talones a Juana. El mismo sentimiento que cuando Cindy se fue y a ella tampoco nunca la deje de querer. A lo mejor, pueden convivir el nuevo con Juana en mi mente y así sentirme un poco mejor.